Aunque no lo creas, la reina Letizia, Madonna y Nicole Kidman, tienen una cosa en común: sus brazos firmes y torneados.
No son pocas las veces que se ha hablado de los brazos tonificados de la reina Letizia. Sin palabras nos ha dejado en ocasiones en esos eventos en los que su vestido los dejaba al descubierto. Y entonces, nos empieza a rondar en la cabeza: ¿qué hay que hacer para tener esos brazos firmes?
Pues está claro que una buena rutina de entrenamiento de brazos es fundamental. Tonificar los brazos a base de ejercicios diseñados para esta zona, son el punto de partida. Pero tenemos buenas noticias (especialmente para vagas): hay un protocolo en cabina que consigue unos brazos firmes, cero flácidos y definidos, sin cicatrices. Un efecto lifting perfecto para cuando lleguen los tirantes.
Se trata de un tratamiento inductor de colágeno patentado por Sinclair Pharma. Utiliza ácido poliláctico, muy de moda en todas las cabinas de estética. Llegó al mundo de la medicina estética hace relativamente poco en los tratamientos de remodelación de glúteos para proyectar su volumen, entre otras cosas.
Ahora, gracias a la “curiosidad” de algunos especialistas, se ha comprobado que el ácido poliláctico, también es muy efectivo para combatir las llamadas “alas de murciélago” en los brazos sin tener que recurrir a procedimientos como la braquioplastia, que no está exenta de cicatrices.
Uno de esos expertos es Moisés Amselem que ha desarrollado Arms Lift, de Lanluma.
¿Qué es?
“Se trata de una técnica que consigue un efecto lifting no quirúrgico en los brazos a través de la recuperación de volúmenes mediante la producción de colágeno, con un potente inductor como es Lanluma”, explica el doctor Amselem.
¿Para quién está recomendado?
El experto lo recomienda para los pacientes que han tenido pérdidas importantes de peso y volumen, especialmente en los brazos, pero también aquellos que quieran prevenir la flacidez. Recupera los volúmenes en la cara anterior y media del brazo.
¿Para quién NO?
También hay que tener en cuenta este punto y es quién no debería someterse a este tratamiento. “Hay diversos factores que pueden influer, como la edad, en los que se pierde la capacidad de generar colágeno y los resultados no serían los esperados”, dice el doctor.
Los resultados
Tras el tratamiento, el experto lo tiene claro: “brazos tersos y piel rejuvenecida”. Hacia el mes después del procedimiento, comienzan a verse con más claridad los efectos y son aún mas evidentes hacia los 4 meses. A partir de ahí seguirán mejorando, incluso, hasta el año. Decrecen hacia los 2 años.
Sesiones necesarias
Para obtener unos resultados óptimos se recomiendan 2 sesiones espaciadas en 1 mes aproximadamente. “En los casos de flacidez más severa, podría plantearse una tercera sesión pasados los 4 meses”, señala Amselem.
¿DUELE?
La respuesta es NO. “Se inyecta anestesia sólo en el punto de entrada de la cánula, pero más que por el dolor en sí, por la vasoconstricción para evitar el sangrado. No precisa tiempo de baja y el paciente se puede incorporar de forma inmediata a su vida habitual”, explica el doctor.
¿Tiene efectos secundarios?
Aunque es raro, el doctor avisa de que en algunos casos, puede haber efectos adversos como son la inflamación o dolor leve y transitorio que, en cualquier caso, se resuelve en los primeros días. “Es muy raro que aparezcan infecciones si el tratamiento se realiza en condiciones adecuadas”, asegura.
Precio
Depende de los viales que se utilicen y la severidad de cada caso. Lo normal es utilizar entre 1 o 2 viales en la primera sesión y 1 vial al mes después. Cada vial cuesta 500 €.
Vamos, que estás a tiempo de poner tus brazos a punto antes de que llegue la temporada intensiva de tirantes.
Blanca del Río es experta es belleza y estilo de vida. La salud mental y la creatividad son otros dos pilares de inspiración para escribir. No se le escapa un color nuevo de pelo, un corte, una sombra de ojos o una forma viral de hacerse el 'eyeliner'. Le fascina adentrarse en el mundo de la alimentación, indagar en cómo se cuidan en todas las partes del mundo y qué podemos aprender de todos esos rincones para mejorar nuestra salud, por dentro y por fuera. Así que no es de extrañar que tan pronto te encuentres un artículo suyo sobre lo más visto en el backstage de París en maquillaje, como temas referidos a cómo explotar tu lado más creativo, cómo gestionar tus emociones o cómo aprovechar mejor tu energía. Las redes sociales son una de sus fuentes pero no tiene FOMO, porque donde más inspiración encuentra para escribir sobre cualquier tema, es en los libros. Devora todo aquello que sale al mercado en forma de ensayos y manuales sobre todos los temas que aborda a diario, pero pocas veces la encontrarás leyendo una novela (y menos de amor). Blanca se graduó en Periodismo en la Universidad Rey Juan Carlos de Madrid, se formó como 'cool hunter' en la escuela de moda, arte y diseño IED de Madrid, así como en fotografía y artes visuales y digitales con los mejores profesionales.
Mientras tanto, ha podido completar su expertise con grandes expertos en el terreno de la belleza, la salud y el bienestar gracias a su trabajo en medios de comunicación especializados del ámbito digital, en los que ya acumula más de 15 años de experiencia.