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Las ojeras nos traen de cabeza. Buscamos incesantemente los parches de ojos que nos ayuden a calmarlas, la crema de contorno de ojos que sirva para tratarlas y atenuarlas, o el producto definitivo que las haga desaparecer, como aquel corrector con propiedades de contorno de ojos. Porque el corrector es imprescindible. O no.
Hasta el momento, el corrector de ojeras no podía faltar. De un plumazo las eliminaba aunque fuera por unas horas, alisaba la piel e iluminaba la mirada. Por supuesto, siempre después de sumar su poder al de una crema de contorno de ojos que ya suavizase un poco esta zona tan conflictiva del rostro. Pero ahora ha sido sustituido por el bronceador.
Sí, como lo lees. Ese producto más oscuro que tu tono de piel que usas para marcar estratégicamente ciertas partes de la cara, dar profundidad y sombreado es ahora el que tapa las ojeras. ¿Pero cómo es esto posible?
Cómo se usa el bronceador como corrector de ojeras
Este truco barra tendencia nueva para cubrir las ojeras ha nacido en TikTok, como era de esperar. Y allí se han dado las claves para recrearlo y, lo mejor, también los motivos por los que funciona.
Básicamente, el bronceador cubre mejor y de forma más natural la ojera que un corrector debido a que el bronceador está hecho con tonos cálidos, melocotón, rojizos y anaranjados, que son los que mejor neutralizarían esos tonos morados y oscuros de debajo del ojo al ser complementarios.
El resultado es un tono mucho más igualado y homogéneo con el resto del rostro, además de una mirada más amplia y enfatizada.
Lo que necesitas para reproducir tú misma el truco del bronceador corrector es un bronceador líquido, que incluya un pincel o una esponjita para aplicarlo directamente sobre el rostro. Este tipo de bronceadores es mucho más suave y no queda tan intenso como uno en polvo.
La opción perfecta es esta de Inglot, que se aplica fácilmente gracias a su pincel y se funde completamente con la piel.
Otra alternativa es esta de Wibo, que es más bien una mousse con acabado aterciopelado, pero también súper fácil de extender.
O esta de Makeup By Mario, que es un sérum bronceador y escultor, que aporta luminosidad. Lo mejor es que también tratarás la mirada.
Aunque, si lo prefieres y controlas así mejor la cantidad de producto que aplicas, puedes usarlo también en barra. Como con este de Kiko Milano.
Kiko Milano Sculpting Touch Creamy Stick Contour 201
Después, habrá que extenderlo a toques por el contorno de ojos para difuminar y unificar la piel con el producto de maquillaje.
El tono del bronzer tampoco debe ser excesivamente oscuro, sino el que usarías de forma natural para poner por el resto del rostro. Sino quedará demasiado marcado. La idea es que se mezcle fácilmente con la piel.
Perfecciona la técnica
Si el resultado que queda con esta tendencia te parece natural pero te gustaría que disimulase un poco más, no te preocupes, no eres la única y las que más saben de belleza en TikTok tienen la solución.
Aplica un punto en la parte más hundida de la ojera, justo en línea con el lacrimal, y difumina para dar luminosidad.
Lo que hacemos normalmente es elegir tonos de corrector demasiado brillantes que lo que hacen es resaltar la oscuridad de la ojera y que quede opaco. Por eso, puedes usar esta nueva técnica para neutralizar los tonos oscuros y alisar la piel del contorno de ojos, y, después, aplicar el corrector.
De esta forma no sólo enfatizarás la mirada, sino que la harás más intensa y profunda pero sin que pierda brillo, sino todo lo contrario.
María Muñiz es experta en belleza. No hay tendencia en manicuras y pedicuras, truco de maquillaje o corte de pelo de moda que se le resista. Lo que más le gusta en el mundo es un pintalabios rojo que se pueda sumar a su colección de más de 100, además de probar lo nuevo en tratamientos para el pelo fino, aceites para labios, cremas de todo tipo, sérums y contornos de ojos posibles. Eso sin contar cada perfume que ve la luz. Si pueden ser perfumes florales y frescos, mejor.
Por eso, no puede vivir sin redes sociales, en las que bucea hasta que da con lo último que se lleva en cada espejo y neceser del mundo (hasta lo que pasa más desapercibido). Internet es su medio natural, se siente como pez en el agua después de una trayectoria de casi diez años en medios digitales, que comenzó cuando se graduó en Periodismo y Comunicación Audiovisual en la Universidad Rey Juan Carlos de Madrid.
Desde entonces, María Muñiz ha pasado por cabeceras de moda y belleza como Harper’s Bazaar o Cosmopolitan como redactora de belleza. Ahora ha vuelto a ELLE, uno de los primeros medios donde pudo especializarse en la comunicación digital, para tomar las riendas de la sección de belleza, contarte todo lo que necesitas saber sobre novedades y tendencias y crearte alguna que otra necesidad.
