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Los días de mal pelo son prácticamente imposibles de solucionar. Sobre todo, porque parece que cuanto más intentamos hacer para arreglarlo más lo empeoramos. De hecho, llega un punto que ya no sabes qué más hacer y te das por vencida. Tienes dos caminos: o volver a meter la cabeza debajo del grifo y empezar de cero, algo que no te garantiza que el encrespamiento o que el pelo electrificado y sin forma se recupere; u optar por un recogido.
Esta segunda opción es realmente interesante. Especialmente, cuando tienes el pelo fino y entonces un día de mal pelo se traduce en algo realmente dramático: el cabello se ve poco denso, frágil y está cargado de electricidad estática. Si pasas un peine es peor porque parece aún más fino.
Por suerte, las que más saben de pelo fino han puesto de moda un peinado de lo más fácil y cómodo para solucionar estos días (que en invierno son bastantes). Yo lo he puesto en práctica y doy fe de que realmente funciona. Pero no es apto para cualquier tipo de melena, sino que en la que mejor queda es en los bobs desde el clavicut hasta el que llega un poco por debajo de la barbilla.
En qué consiste el recogido para pelo corto y fino que se lleva este otoño
Este peinado no tiene mucho misterio. Es, simplemente, un moño bajo. Pero lejos de hacerlo con el máximo cuidado para que, además, quede con una forma bonita y con precisión de que no quede ningún pelo fuera, se hace buscando que el resultado sea despeinado.
Esto le dará una personalidad más del día a día, más relajado y más informal. Aunque es cierto que al mezclarlo con vestidos o con trajes hace que el look no pierda sofisticación pero sí hace que se relaje un poco y no sea demasiado sobrio.
Pero este efecto despeinado se produce sólo en la parte de abajo del peinado, ya que por arriba se lleva pulido.
Aunque también puede tener una variación y llevarlo con los mechones delanteros sueltos, si quieres darle una personalidad más romántica. Esos mismos mechones también puedes colocarlos detrás de las orejas si prefieres un resultado pulido pero no excesivamente, para estar más despreocupada de si se suelta algún pelito o no.
En mi opinión, lo mejor de este peinado es que vaya evolucionando a lo largo del día, con más o menos pelos sueltos, con los mechones delanteros recogidos o no o con los que pertenecen a las patillas sueltos para dar movimiento al recogido.
Cómo se hace
Es un peinado realmente fácil de hacer y además no se tarda nada en recrearlo. Pero antes de empezar, necesitas un spray que dé volumen y textura para poder manejar mejor el cabello y que se fije bien el peinado. Sobre todo en días de lluvia y humedad, que te ayudará también a combatir el encrespamiento.
Este de Livingproof ayuda a que el pelo parezca más grueso y a que se vea con más volumen.
O, en lugar de este tipo de sprays, puedes hacer lo mismo con champú en seco, como este de Batiste con olor a cereza.
Después de aplicarlo, cepilla bien el cabello hacia atrás, reservando la parte delantera del cabello. Si quieres dejar un par de mechones sueltos, esta franja debe ser más fina, sino, haz una línea transversal a mitad de la cabeza. Después, cepíllalos hacia atrás y recoge todo el pelo a la altura de la nuca como si fueras a hacer una coleta baja.
En lugar de soltar el cabello recogido, déjalo dentro de la goma, con las puntas hacia arriba. Despeina y abre esas puntas. Fija el resultado con un poco de cera. Aplícala con el cepillo y después, para recoger los pelitos más pequeños, haz lo propio con un cepillo de dientes.
Esta de Redken es en spray, para evitar dejar residuos y que se seque más fácilmente. Además, la fijación es de alta duración.
Puedes poner una horquilla para fijar si tienes pelitos muy cortos en la nuca. Y listo, ya no hay más días de mal pelo.
María Muñiz es experta en belleza. No hay tendencia en manicuras y pedicuras, truco de maquillaje o corte de pelo de moda que se le resista. Lo que más le gusta en el mundo es un pintalabios rojo que se pueda sumar a su colección de más de 100, además de probar lo nuevo en tratamientos para el pelo fino, aceites para labios, cremas de todo tipo, sérums y contornos de ojos posibles. Eso sin contar cada perfume que ve la luz. Si pueden ser perfumes florales y frescos, mejor.
Por eso, no puede vivir sin redes sociales, en las que bucea hasta que da con lo último que se lleva en cada espejo y neceser del mundo (hasta lo que pasa más desapercibido). Internet es su medio natural, se siente como pez en el agua después de una trayectoria de casi diez años en medios digitales, que comenzó cuando se graduó en Periodismo y Comunicación Audiovisual en la Universidad Rey Juan Carlos de Madrid.
Desde entonces, María Muñiz ha pasado por cabeceras de moda y belleza como Harper’s Bazaar o Cosmopolitan como redactora de belleza. Ahora ha vuelto a ELLE, uno de los primeros medios donde pudo especializarse en la comunicación digital, para tomar las riendas de la sección de belleza, contarte todo lo que necesitas saber sobre novedades y tendencias y crearte alguna que otra necesidad.
