Quien todavía no se ha atrevido a cortarse el flequillo, va tarde en lo que a estar al día con las tendencias se refiere. El flequillo se ha convertido en imprescindible de todo look que se precie, y ya hay tantos tipos como gustos y melenas: cortina, recto, a lo Jane Birkin, etc. Pero hay uno que estas últimas semanas ha tomado más importancia que los demás.

Hablamos de un flequillo irregular, que se lleva despeinado y despuntado, porque lo que busca es un aspecto súper natural y nada producido. Literalmente, es como si te acabaras de levantar o de ducharte y salieras directamente a la calle. Por eso tantas, incluso a la modelo Emily Ratajkowski, se han sumado ya a este flequillo. Aunque su comodidad no es la única razón de su éxito.

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@emrata//Instagram

Por qué se lleva tanto el flequillo despeinado

Una de las razones principales es que es un flequillo asequible para todo el mundo, algo que no es muy común entre los flequillos. Como decíamos, es muy cómodo y fácil de llevar porque no requiere ningún esfuerzo ni complicación. No se lleva peinado ni pulido, por lo que no quita tiempo y esto lo hace muy práctico para esas mujeres que siempre van con prisa o que cuentan con el tiempo justo antes de salir de casa. Es un peinado que siempre va a estar bien porque no se sujeta a reglas.

Todo esto implica que es un estilo de bajo mantenimiento, algo que no suele pasar con flequillos que no sean largos y desfilados. No hay que estar pendiente de retocarlo ni de pasar cada poco por la peluquería para mantenerlo corto y regular.

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Edward Berthelot//Getty Images

Otro de los motivos de su éxito es que da igual si tienes el pelo liso o rizado, este flequillo funciona sea como sea el cabello que lo elige. Se adapta a él. Lo mejor es que aporta mucho volumen, por eso los cabellos finos lo adoran.

Lo mismo pasa con las distintas formas de rostro. Como suele ocurrir, es una opción perfecta si tienes la frente amplia y si tu rostro es alargado. Pero al ser despuntado y poder llevarse tan largo o corto como se quiera (siempre por encima de los ojos, claro), queda bien hasta en los rostros más cuadrados y angulosos.

Además, al no tener una forma definida y dejarlo a su libre albedrío, aporta frescura y dinamismo al rostro. Esto hace que se potencie mucho más el efecto rejuvenecedor de los flequillos. Por su parte, su actitud desenfadada también quita años de encima.

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Edward Berthelot//Getty Images

Cómo se lleva

Literalmente, sienta bien a todo tipo de melenas y cuando afirmamos eso nos referimos también al largo y la forma. Puede llevarse con el pelo corto, incluso con un bixie, que es ese pixie más alargado y bohemio, aunque como más se ve es en medias melenas por la clavícula o con el cabello largo como Ratajkowski. De nuevo, no hay reglas.

Cómo se consigue

A pesar de que es un flequillo que no se complica y que se lleva secado al aire, no es sencillo de diseñar y cortar. Sobre todo, porque también hay que tener en cuenta remolinos, direcciones que toma el pelo y, por ejemplo, en las melenas finas y poco densas, también hay que tener en cuenta la cantidad de pelo que se toma para el flequillo, para que la melena quede bien repartida y no se vea escasa.

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Edward Berthelot//Getty Images

Inconvenientes

No todo podía ser perfecto. Hay cosas que hay que tener en cuenta antes de apostar por este corte de pelo. Como es un estilo informal, hay ocasiones más especiales en las que el peinado puede rebajar la sofisticación de tu look, aunque siempre puede dar un aire romántico.

Otro de los puntos en contra de este flequillo es que se hace algo incómodo cuando empieza a crecer y llega a los ojos. Eso sí, es más fácil de arreglar en casa.

Headshot of María Muñiz

María Muñiz es experta en belleza. No hay tendencia en manicuras y pedicuras, truco de maquillaje o corte de pelo de moda que se le resista. Lo que más le gusta en el mundo es un pintalabios rojo que se pueda sumar a su colección de más de 100, además de probar lo nuevo en tratamientos para el pelo fino, aceites para labios, cremas de todo tipo, sérums y contornos de ojos posibles. Eso sin contar cada perfume que ve la luz. Si pueden ser perfumes florales y frescos, mejor.

Por eso, no puede vivir sin redes sociales, en las que bucea hasta que da con lo último que se lleva en cada espejo y neceser del mundo (hasta lo que pasa más desapercibido). Internet es su medio natural, se siente como pez en el agua después de una trayectoria de casi diez años en medios digitales, que comenzó cuando se graduó en Periodismo y Comunicación Audiovisual en la Universidad Rey Juan Carlos de Madrid.

Desde entonces, María Muñiz ha pasado por cabeceras de moda y belleza como Harper’s Bazaar o Cosmopolitan como redactora de belleza. Ahora ha vuelto a ELLE, uno de los primeros medios donde pudo especializarse en la comunicación digital, para tomar las riendas de la sección de belleza, contarte todo lo que necesitas saber sobre novedades y tendencias y crearte alguna que otra necesidad.