El chivato de Pinterest ha vuelto a saltar. También Instagram, donde la búsqueda #coconutgirl ya tiene mas de 16.000 resultados en su registro. Incluso sospechamos cuando los filtros más utilizados en aplicaciones como Prequel, son los que reproducen fielmente las imágenes de finales de los 90, el efecto del VHS distorsionando la imagen o los colores vibrantes al estilo Indie Kid (hay una categoría de filtros que incluso toma este nombre).
Y es curioso porque las búsquedas y el incremento del interés por determinadas cosas y elementos ha hecho que surja una nueva generación de chicas. Ni millenials, ni Z. Va mucho más allá y tiene que ver con una estética muy particular que ha despuntado, eso sí, entre la generación Z. Las han llamado Coconut Girl y su principal característica es la nostalgia por los años 2000.
Hace unos años mirábamos con recelo a nuestro pasado más reciente y ni por asomo hubiéramos pensado que los estampados hawaianos, los gráficos inspirados en la cultura surfera, las conchas de puka, collares de cuentas, la fiebre por el crochet o las sandalias de plataforma iban a salir más allá de los primeros años de la década de los 2000. De hecho, renegábamos con fuerza de todo aquello (a pesar de haber sido una de ellas). Pues bien, ahora esa nostalgia es un tesoro para este tipo de personas, a las que cariñosamente ya se les ha apodado Coconut girl. Y girls, porque en su mayoría son mujeres de una generación cuya adolescencia nunca se situó en esos años. Y ahí está lo curioso: nostalgia por una época en la que estaban naciendo… o no habían ni nacido.
Pero la historia se repite. Como cuando la generación millenial siente nostalgia por la última etapa de los 80, cuando muchos estaban naciendo y otros tanto aún no lo habían hecho. O como toda esa generación X que siente verdadera pasión por todo lo referido a los 60 y 70 siendo ellos unos bebés, incluso, no habiendo nacido.
Así que ahora el ciclo vuelve a girar en favor de los Z. Y aunque seas o no perteneciente a esta generación por rango de edad, puede que te hayas sorprendido a ti misma buscando collares de cuentas en Pinterest y seas una Coconut girl más.
Ahora bien, ¿qué búsquedas las delatan? ¿qué ha explotado en interés en la red social? Los datos son interesantes y tienen tal relevancia que son responsables directos de que las tiendas ahora estén plagadas de toda esta estética que nos devuelve a los años en que cantábamos con el corazón roto por el primer amor ese ‘Hit me baby one more time!” (¿o acaso pensabas que los bucket estaban por casualidad de vuelta?)
El mundo postpandémico
Ya se habla de “mundo postpandémico” y el optimismo se adueña de todos. Esto también tiene traducciones muy concretas: desde la búsqueda activa de inspiración optimista a través de prendas en colores mucho más alegres a una renovación total de la estética, como buscando encontrar un nuevo yo después de tanta oscuridad. ¿En números? Desde Pinterest nos lo traducen: “las consultas relacionadas con estética Coconut Girl, se han multiplicado por 36 en el último año, entre la generación Z, uno de los segmentos de público responsables de la mayor parte del crecimiento de usuarios nuevos en Pinterest”, dicen.
Y ahora sí, desmembremos a esta Coconut Girl para saber si tú eres una de ellas (y todavía no lo sabes…).
TOP búsquedas de las Coconut Girls
Tatuaje glitter de hibiscus
Si hay algo que vuelve locas a las Coconut Girl es la flor de hibisco (hibiscus), en todas sus versiones. Y ahora, en tatuajes glitter, arranca pasiones en forma de likes.
Top de hibiscus
No iba a ser menos. Esta flor, propia de la estética surfera, también se ve plasmada en tops, crop tops y patrones halter muy característicos. Y se pegan por ellos.
Collares de cuentas
No mientas: tú también has buscado lo último en collares de cuentas en las últimas semanas. Lo has visto hasta la saciedad en Instagram y de tanto verlo (y apenas procesarlo), se te ha metido en la cabeza como esa cancioncilla odiosa que no te puedes quitar. Dicho y hecho, son un TOP TREND ahora mismo. Y no sólo en collares: pulseras, tobilleras y hasta cadenas para los móviles.
Mini vestido de hibiscus
La flor de hibisco también decora los mini vestidos del verano. Y las búsquedas no mienten. Todo el mundo quiere uno.
Sombrero bucket
Que TODAS las firmas tengan un bucket actualmente entre sus filas, es por algo. En el fondo, hay una Coconut girl en nuestro interior llamando a la puerta para salir a bailar (con su bucket bajo el sol).
Top estilo halter
El patrón de top halter está entre los favoritos entre las búsquedas. Y los de crochet ganan por goleada.
Bikinis
Ni bañadores, ni cut out, ni cinturas altas, ni sujetadores balconette. Las coconut girl buscan el bikini más clasico y tradicional que, por cierto, ahora se da la vuelta en el pecho y los triángulos se ponen del revés, dando como resultado un escote redondeado.
Sandalias de plataforma
Primero fueron las Spice Girls y después, hacia los 2000, hasta marcas puramente de surf como Quicksilver y Reef sacaron sus propias plataformas de corcho para la playa. Ahora, vuelven a explotar, 20 años después.
Bolso de nylon
Identificarás sin equivocarte a la generación Z porque llevará este bolso por la calle, CON TODO. Y tú también lo llevaste, así que procura evitar el juicio rápido.
Fiebre por el ganchillo
Pero fiebre de verdad. Y ahora, con el DIY añadido.
Tatuaje glitter de delfines
Confieso que hacia el 2002, yo me hice un tatuaje de delfines. No era glitter, qué más hubiera querido en ese momento (porque a día de hoy me doy cuenta de que fui una Coconut Girl de libro), sino de henna. Pero en ese momento recuerdo que ERA LO MÁS. Y de aquellas tierras, estos lodos. No serán pocas las que se encuentren en esta dicotomía personal de querer volver a ese momento y ponerte un tatuaje glitter con un delfín en el brazo recordando tus años locos y por otro lado, horrorizarte al pensarlo. La vida.
Beauty: así se peina y maquilla una Coconut Girl
Poner Coconut Girl Aesthetic en Pinterest es abrir un mundo de colores mágicos ante ti. Lo primero de todo, vas a ver MUCHO GLITTER. Y ya hemos hablado de lo que los delfines y los hibiscus brillantes les gustan. Pero en el terreno de la belleza, estas chicas también son peculiares y podrás identificarlas (e identificarte) si…
De repente te sorprendes a ti misma luciendo uñas en verde neón, combinadas con smiles, ying yang o extraterrestres. Ya son tendencia este verano.
O si en este preciso momento llevas una manicura daisy.
Lucen manicuras francesas con… sí, flores de hibisco psicodélicas.
Lucen melenas extra largas con ondas al más puro estilo surfero, nada sofisticadas y más bien naturales y salvajes. Recuperan el pelo rubio con californianas más puro y tradicional.
Llevan Baby braids.
Y coletas mini con baby braids.
Apuestan por el maquillaje ‘sunkissed’ con un toque de máscara y labios jugosos. El plan: cejas marcadas, máscara negra, blush rojizo en pómulos y nariz y labios hidratados.
Llevan pañuelos y sombreros en el pelo.
Y sombreros vintage con flequillos salvajes.
Del 1 al 10, ¿cuánto de Coconut Girl eres? No lo niegues: el pasado siempre vuelve… y a veces mola.
Blanca del Río es experta es belleza y estilo de vida. La salud mental y la creatividad son otros dos pilares de inspiración para escribir. No se le escapa un color nuevo de pelo, un corte, una sombra de ojos o una forma viral de hacerse el 'eyeliner'. Le fascina adentrarse en el mundo de la alimentación, indagar en cómo se cuidan en todas las partes del mundo y qué podemos aprender de todos esos rincones para mejorar nuestra salud, por dentro y por fuera. Así que no es de extrañar que tan pronto te encuentres un artículo suyo sobre lo más visto en el backstage de París en maquillaje, como temas referidos a cómo explotar tu lado más creativo, cómo gestionar tus emociones o cómo aprovechar mejor tu energía. Las redes sociales son una de sus fuentes pero no tiene FOMO, porque donde más inspiración encuentra para escribir sobre cualquier tema, es en los libros. Devora todo aquello que sale al mercado en forma de ensayos y manuales sobre todos los temas que aborda a diario, pero pocas veces la encontrarás leyendo una novela (y menos de amor). Blanca se graduó en Periodismo en la Universidad Rey Juan Carlos de Madrid, se formó como 'cool hunter' en la escuela de moda, arte y diseño IED de Madrid, así como en fotografía y artes visuales y digitales con los mejores profesionales.
Mientras tanto, ha podido completar su expertise con grandes expertos en el terreno de la belleza, la salud y el bienestar gracias a su trabajo en medios de comunicación especializados del ámbito digital, en los que ya acumula más de 15 años de experiencia.