Querido Universo,

Dice mi amiga Sonia que los años pares son de cosecha y los impares de recogida. Yo no sé mucho de cultivos pero este año he removido toda la tierra.

Hace justo un año estaba llorando en la puerta del Opencor. Era domingo y pensé que si no hacía algo al respecto me esperaban un montón de domingos bajoneros en la puerta de un supermercado abierto en festivo. Esa misma tarde llamé a la que hoy es mi terapeuta.

Dice mi hermana que este año podríamos hacer el amigo invisible por cinco euros pero yo prefiero tragarme el especial de José Mota a que me regalen otro mojón inservible de la tienda de la vaca. De hecho la semana pasada mi madre puso en YouTube el numerito de Cruz y raya de la Nochevieja del dosmil y se me pasó la ansiedad.

Una astróloga me dijo que me fuera Alburquerque a pasar mi cumpleaños porque allí se concentraba toda la energía buena para mí. No le hice caso y puede que esté pagando las consecuencias porque se me han acabado las pilas.

Dicen que cuando pasa la tormenta es cuando viene la calma, pero yo en mi propio temporal estaba muy contenta y ahora me estoy ahogando.

Cuando murió mi marido, mi padre me dijo: ahora tú tienes que estar contenta. Yo desobedezco bastante pero a mi padre no, así que seguí el consejo a rajatabla. Spoiler: no funciona.

Mi padre este año protagoniza un anuncio de flanes porque se apuntó a una agencia para sacar algo de pasta. Después de ser profesor toda su vida, se dedica a lo que le gusta: pintar, ser actor y pasar de todo el mundo.

lucia be
dr


Dicen que de lo que más se arrepiente la gente antes de morir es de no seguir los sueños, trabajar demasiado, no expresar los sentimientos, no ser feliz y no conservar a los amigos. Mi padre dice que eso de expresar lo sentimientos es una bobada. Y digo yo: ¿es que ni en el lecho de muerte nos podemos callar un poquito?

Ambiciones modestas, dice mi editor. Lo que viene siendo dormir - comer - caminar. Tengo que hacerle caso y entregarle un libro, pero se me da mal obedecer. Eso ya lo he dicho.

Me dijo mi amigo Vins que el universo te ponía exámenes de cosas que uno tiene que aprender y yo le dije pues vaya cabrón el universo. Espero que no te ofendas y me pongas buena nota, aunque sinceramente tampoco me preocupa. Hoy me ha dicho mi hijo mayor que soy la mejor madre del mundo. Con eso tengo mi año de cosecha superado.