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Por lo general, hasta dar con un sí, los actores suelen convivir con el rechazo al que reconocen que se van acostumbrando con la experiencia. Sin embargo, hay algunos intérpretes más tozudos que otros que no han sabido aceptar un "no" de primeras. Por ejemplo, Meryl Streep tuvo que escuchar antes de hacer ‘Memorias de África’ que no era suficientemente atractiva para el papel o Anne Hathaway, tuvo que insistir para trabajar en ‘El diablo viste de Prada’ al ser la novena opción para el papel de Andy.
En este caso, prometieron que iban a clavarlo y lo hicieron. La cuestión es que la idea que un director o productor tiene en mente para contar una historia a veces no puede hacerse realidad de manera exacta así que hay un pequeño margen para convencerles por otros motivos.
Una idea que lo cambió todo
Julia Roberts da la sensación de no haber tenido que esforzarse demasiado para ser buena, ya que varios de sus compañeros han destacado que es una actriz muy talentosa. Sin embargo, para interpretar uno de sus primeros papeles no era en absoluto la imagen que buscaban.
En 1989, durante la presentación de ‘Magnolias de acero’ con solo 22 años, la actriz contaba en una entrevista con David Letterman que, para el que fue su primer gran papel en la película ‘Mystic Pizza’ (1988) –una producción pequeña con poco presupuesto–, fue a la prueba con el pelo rubio y mucha actitud. Sin embargo la actriz confesaba: "En el casting me dijeron que físicamente no encajaba en absoluto porque buscaban a alguien de aspecto portugués".
Aunque eso no quedó ahí, sino que mientras volvía a casa se le ocurrió comprar un tinte negro y se lo puso directamente en su pelo rizado. El único problema es que si se tocaba el pelo durante la prueba, la mano se le teñiría también de negro. Le pidieron hacer una segunda lectura y volvió con su cambio de look. Después volvieron a llamarle para hacer otra prueba con quien sería su compañero Adam Storke, este sí le tocó el pelo mientras interpretaba y como era de esperar, acabó con las manos negras. Aún así, a pesar de los obstáculos consiguió convencerles y se hizo con el papel.
Parte del camino
‘Mystic Pizza’ no es uno de sus títulos más importantes, era una película sencilla, pero fue su primer gran proyecto cinematográfico y el inicio de una carrera que no ha dejado de crecer. Desde entonces, la actriz no ha parado de trabajar y se ha consolidado como una de las intérpretes más respetadas de Hollywood, con papeles icónicos como ‘Pretty Woman’, ‘Notting Hill’ o ‘La boda de mi mejor amigo’.
Aquel primer “no encajas” podría haberle hecho abandonar y seguir con otra prueba, pero su decisión de tomar el control y transformarse para el personaje le ayudó a marcar la diferencia.
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Licenciada en Periodismo y Humanidades en la Universidad Carlos III de Madrid, con experiencia en prensa escrita en distintos medios digitales, y especializada en marketing y comunicación. Le interesan las historias, ya sea en papel, en pantalla o en una buena conversación. Siempre tiene un libro a mano, una película pendiente y una playlist en reproducción.
