Sí, tenemos boda a la vista, y por supuesto vamos a ir toda la familia, cada uno ya pensando en su look, y sobre todo ya soñando con ese momento. Mi abuela de 89 años, que es muy my clásica (bueno, como casi la mayoría de las mujeres de esa generación) siempre tuvo claro que su look de invitada de boda sería elegante y bonito, pero sobre todo cómodo. Y es que claro, finales de junio, calor, y aunque es boda de noche, hay que tener en cuenta las horas que se pasa de pie, y que sí, mi abuela es bailonga y quiere poder marcarse un pasodoble con sus nietos. Por eso, una vez eligió el vestido, un diseño largo estampado ideal de la sección de fiesta de El Corte Inglés, toda su preocuopación era el calzado. Suele ir en zapatillas, zapatos planos y a veces unos salones anchos con tacón bajo y ancho, pero para esta boda le apetecían unas sandalias de cuña baja. Y las hemos encontrado. En Skechers. Mi abuela no daba crédito.
Porque ella asocia esta firma a zapatillas, claro, y no se esperaba que también tenga sandalias con la misma tecnología de plantilla de sus 'slip ins' de Skechers que no se quita ni para ir a jugar a las cartas con sus amigas. Este modelo en concreto de sandalias de cuña de Skechers, el modelo 'Bobs Desert Kiss - Serendipitous' está hecha de piel vegana perforada para ser más fresquitas, una correa de empeine blandita con hebilla metálica, ribete de entresuela perforado y sí, una plantilla acolchada de espuma viscoelástica Skechers.
Este tipo de sandalias de ante son tendencia este verano, y más allá de eso, sujetan el pie, le dan comfort, y mi abuela cuando se las ha probado, ha dicho solo dos palabras: madre mía. Y eso es que sí, ha sido una compra muy buena. Y encima ahora están rebajadas a 37,46.
Te enseño el vestido de El Corte Inglés de mi abuela para su look de invitada de boda
Las sandalias de cuña de ante de Skechers para su look de invitada de boda
Paula Llanos es Jefa de moda en ELLE.es. Licenciada en Periodismo en la Universidad Pontificia de Salamanca, con experiencia en prensa escrita, radio y televisión pero con total vocación digital. Desde el año 2000 (18 años) en internet, en prensa femenina 13 años y 10 años en Elle.es Adicta a la moda, las compras e Instagram. Experta en crear necesidades e identificar prendas y accesorios con una sola foto y en hacer titulares con juegos de palabras.
