Últimamente parece que eso de las bodas sorpresa, y anunciarlas en Instagram cuando menos se espera, es algo que se ha puesto de moda. Si hace algo más de una semana era Amy Schumer la que echaba mano de su perfil para dar tal bombazo, ayer por la noche era Emily Ratajkowski la que se disponía a incendiar la red social. Efectivamente, Emily se ha casado.
Y no sólo ha dado la buena nueva con esta imagen, que ya supera con creces los 500.000 "me gusta". Tal y como ha anunciado storie tras storie, como si de una entrega por fascículos se hubiera tratado, la modelo ha paralizado el universo 2.0 al darse el "sí, quiero", no con el músico Jeff Magid, con el que estuvo 4 años, sino el actor Sebastian Bear-McClard, con el que salía desde hace unas semanas.
"Así que... tengo una sorpesa. Me he casado hoy", podía leerse, poco a poco, en cada una de las imágenes de la boda que aparecían en sus historias de Instagram. Ceremonia, por su parte, pequeña, íntima y celebrada en el City Hall de Nueva York, que lejos queda de tratarse de algo tradicional o de aquellas despampanantes a las que nos tienen acostumbradas las VIPs.
De hecho, no hay más que empezar por el traje de Emily, que, alejándose del lujo y el vestido de princesa blanco de toda la vida, ha apostado por un sastre mostaza de Zara. Se trata de un dos piezas en el que la chaqueta cuesta 69,95 € y el pantalón, 39,95 €. Además, te va a solucionar todos tus problemas estilísiticos para la próxima BBC.
Look, que ha completado además, dejando a un lado tocados de flores y coronas, con un sombrero con velo con el que conseguía un outfit divertido que derrochaba personalidad (más, si cabe).
De esta forma Emily no sólo ha dado el "sí, quiero", sino que además ha hecho pública una relación que todos desconocíamos, confirmando todos los rumores que habían empezando a poblar las redes desde que se la viera junto a su ahora marido el pasado 14 de febrero.
¡Enhorabuena!
María Muñiz es experta en belleza. No hay tendencia en manicuras y pedicuras, truco de maquillaje o corte de pelo de moda que se le resista. Lo que más le gusta en el mundo es un pintalabios rojo que se pueda sumar a su colección de más de 100, además de probar lo nuevo en tratamientos para el pelo fino, aceites para labios, cremas de todo tipo, sérums y contornos de ojos posibles. Eso sin contar cada perfume que ve la luz. Si pueden ser perfumes florales y frescos, mejor.
Por eso, no puede vivir sin redes sociales, en las que bucea hasta que da con lo último que se lleva en cada espejo y neceser del mundo (hasta lo que pasa más desapercibido). Internet es su medio natural, se siente como pez en el agua después de una trayectoria de casi diez años en medios digitales, que comenzó cuando se graduó en Periodismo y Comunicación Audiovisual en la Universidad Rey Juan Carlos de Madrid.
Desde entonces, María Muñiz ha pasado por cabeceras de moda y belleza como Harper’s Bazaar o Cosmopolitan como redactora de belleza. Ahora ha vuelto a ELLE, uno de los primeros medios donde pudo especializarse en la comunicación digital, para tomar las riendas de la sección de belleza, contarte todo lo que necesitas saber sobre novedades y tendencias y crearte alguna que otra necesidad.
